Al ver la calidad de película que es puedo recordar escenas muy buenas, que
según he leído son parte de la historia, como los músicos tocando hasta el
final, y el capitán no abandonando la nave. Esa escena donde el temperamento
flemático del capitán le lleva a estar con cierta calma aceptando su cruel
destino y hundirse junto con el barco.
Pude comprender
mejor ese sentimiento cuando el negocio de mi familia enfrentó crisis serias y
que no vale la pena detallar, pero entendí a mi papá y sus frases de luchar
hasta el final, y obvio mucha gente al ver un poco de crisis abandonaron la
nave, a lo que él agregó, cuando un barco se hunde los primeros que abandonan
son las ratas.
Y es que abandonar
es una mala costumbre humana, reitero que mi familia nuclear sufrió abandono,
cuando la economía flaqueó muchas amistades nos abandonaron. Y en muchos otros
casos, los amigos (que en realidad no lo son o eran) abandonan cuando ya no hay
dinero, o cuando la popularidad desciende.
Conozco gente que
ha pasado por problemas graves de salud, o de acusaciones injustas, y es del
árbol caído que todos hacen leña, las personas sin Dios no sólo abandona sino
que en determinadas ocasiones se quedan cerca solo para acusar, cuestionar y
decir con un tono irónico “yo lo dije” o “yo sabía que te iba a ir mal”.
Quizá sea un error generalizar, pero la
mayoría de personas tienen la mala costumbre de abandonar aún en las familias y
aun en la iglesia, porqué no lo sé con precisión, a veces son celos, mal enfoque
de vida, cuestiones personales, problemas serios y espirituales, pero
cualquiera sea el caso, siempre ocurre.
Ahora en la vida he aprendido algo que me
sostiene, y sé que es parte de lo que sostiene a la iglesia, en la palabra de
Dios está claro que Él no abandona. Si leemos Nehemías 9 el titular dice que
Esdras confiesa los pecados de Israel, y si lo leemos a profundidad
descubriremos grandes cosas.
En el versículo dos dice un par de aspectos
relevantes, primero que se apartaron de los extranjeros, o sea el apartarse es
señal de santidad, la iglesia santa no es la que viste de falda larga y con
velo, o con saco y corbata y pelo corto, es la separada para el señor, el
segundo aspecto fue el inicio de la confesión de pecados, es algo que como
iglesia hoy en día debemos hacer.
El versículo tres revela más porque todo esto
es tan relevante como dije, se leyó la ley de aquel tiempo. Es vital para la
iglesia leer la Biblia, luego de nuevo una confesión y comenzó un tiempo de
adoración. Aclaro que no trato de establecer un orden de culto, es simplemente
una narración de lo que ocurría en aquel tiempo, y que hoy en día podemos
identificar elementos claves para la vida de iglesia no un orden religioso en
que deban hacerse, pero los puntos mencionados no deben fallar.
En los versículos 5 al 15 se narra la grandeza
de Dios como parte de esa adoración antes mencionada, una grandeza desde sus
obras con Abraham hasta las maravillas en el éxodo, pero entre el 16 y 18 de
nuevo se mencionan los pecados de soberbia, dureza, murmuración e idolatría en
que cayó Israel.
Si lo vemos como narrativa diríamos que el
autor está en un sube baja, estamos en santidad =D, confesamos pecados =(,
leemos la palabra =D, confesamos pecados =(, adoramos =’), confesamos pecados
=(. Al final de todo esto concluyo que una muestra de la incapacidad humana,
hay tiempos de santidad, de lectura y de adoración, pero producto de nuestra imperfección
pecaremos y tenemos que recurrir a la confesión siempre.
Pero lo mejor está por venir, el versículo 19
dice, que por su misericordia DIOS NO LOS ABANDONO EN EL DESIERTO, El más que
nadie sabe que hemos pecado, que hemos fallado, tenemos problemas de carácter,
no nos concentramos, etc. Y podemos estar muy mal, pero Dios no nos abandonará,
ni en el desierto, ni en la abundancia ,ni nunca.
Después el pasaje sigue, y cuenta otros
pecados y rebeliones de Israel, y reitera en el versículo 31 queda claro que
Dios es fiel y misericordioso, al final de este discurso en el verso 38 en
respuesta a la fidelidad de Dios el pueblo hace un pacto de fidelidad.
Creo que el pasaje es muy profundo y tiene
material para hacer un libro o dos, pero sin duda el mensaje es que Dios no nos
abandona, el no tiene esa mala costumbre, el permanece fiel 2ª de Timoteo 2:13 lo recalca “Si fuéremos
infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo.”
Dios es tan fiel que si el no fuese fiel sería
una negación, el reto a la iglesia es que hacemos, solo termino meditando con una idea, seamos fieles y dejemos la mala costumbre de abandonar.